Dos murales en Olleros y Sabero ponen en valor a la mujer como fuente de vida

Dos murales en Olleros y Sabero ponen en valor a la mujer como fuente de vida. 

Constituyen un díptico de la artista Miriam González Rosco en el que transmite que la naturaleza no puede comprenderse sin la mujer y el rechazo a la violencia contra ella.

Dos murales en Olleros de Sabero y Sabero ponen en valor a la mujer como fuente de vida. Constituyen un díptico creado por la artista Miriam González Rosco, @rosco.art, para el Ayuntamiento, en el que se transmite que la naturaleza no puede comprenderse sin la mujer y el rechazo a la violencia contra ella.

Como parte de dicho díptico, ambos se complementan y no se pueden entender el uno sin el otro. En ambos, la mujer aparece representada como fuente de vida, en Sabero al amanecer es la creadora del río, mientras que en Olleros al anochecer aparece como creadora de la montaña.

De esta forma, se encuentran unidos por un útero que da vida a los dos pueblos, creando un paisaje dual, que busca poner en valor la existencia de la mujer y transmitir que, al igual que la noche necesita al día y el río necesita a la montaña, y no podrían existir las unas sin las otras, la naturaleza no puede comprenderse sin la mujer. De ahí esta incansable búsqueda de igualdad y el rechazo de cualquier tipo de violencia hacia la mujer.

Este obra impulsada por el Ayuntamiento de la Montaña Oriental Leonesa está financiada con cargo a los créditos recibidos del Ministerio de Igualdad, Secretaria de Estado de igualdad y contra la Violencia de Género.

Fuente: Diario de Valderrueda

Fotografía: Ayuntamiento de Sabero