El Tribunal Superior de Justicia suspende la caza en Castilla y León
El Tribunal Superior de Justicia suspende la caza en Castilla y León
El auto de la sala de los Contencioso-Administrativo de Valladolid atiende una petición de PACMA y ordena la paralización cautelar del decreto que regula la conservación de las especies cinegéticas.
Adiós temporal a la caza en Castilla y León.
El auto de la sala de los Contencioso-Administrativo de Valladolid ha atendido la petición de PACMA y ha ordenado la paralización cautelar del decreto que regula la conservación de las especies cinegéticas.
En ese sentido, en cuanto el auto sea enviado a las partes, la caza será suspendida en Castilla y León, a expensas de los recursos que se interpongan en el plazo de cinco días.
La decisión del Tribunal Superior de Justicia supone la paralización de toda actividad cinegética en Castilla y León. La suspensión atiende al recurso presentado en su día por el partido animalista PACMA.
El partido animalista sostiene, para fundamentar su pretensión cautelar, que la aplicación de la norma impugnada va a producir daños de imposible o difícil reparación, ya que se va a autorizar la actividad cinegética de determinadas especies silvestres sin contar con los estudios científicos precisos que lo avalen.
Lo que ahora se paraliza es el Decreto 10/2018, de 26 de abril, por el que se modifica el Decreto 32/2015, de 30 de abril, que busca establecer qué especies pueden ser consideradas como cinegéticas y da cobertura a la orden anual de vedas de la región.
En el auto la Sala se reconoce la importancia que tiene la caza para Castilla y León desde el punto de vista económico y social, valorando los daños que pueden causarse a la fauna salvaje como consecuencia de la práctica de esta actividad, concluyendo que los daños para los intereses generales derivados de la suspensión del Decreto pueden ser controlado por la Administración, mientras que el interés «más necesitado» es el de conservación de la fauna silvestre.
El auto señala la falta de estudios actualizados y contrastados que argumenten que las especies incluidas en la lista de cinegéticas se pueden cazar sin afectar a sus poblaciones.
A la altura de calendario a la que nos encontramos, esta sentencia afectará a la caza de control por daños a la agricultura ocasionados por especies como el conejo y el jabalí. Lo siguiente, y lo que más ha alarmado al sector cinegético, ha sido la caza del corzo, a escasas semanas del comienzo de la temporada corcera, que será el próximo 1 de abril.
Fuente: Diario de Valderrueda
Fotografía: archivos - Reserva de Caza de Mampodre